Problemas con el intercambiador de calor: el intercambiador de calor puede estar obstruido o dañado, lo que impide que el agua circule adecuadamente y se caliente de manera constante.
Problemas con el termostato: el termostato que controla la temperatura del agua caliente sanitaria puede estar fallando, lo que puede provocar que el agua se caliente y enfríe de manera intermitente.
Problemas con la sonda de temperatura: la sonda de temperatura que mide la temperatura del agua puede estar defectuosa o mal calibrada, lo que puede provocar que la caldera no detecte correctamente la temperatura d